MARÍA DOLORES FERNÁNDEZ MARTÍN
JESÚS VÍCTOR GARCÍA
El pueblo de Arroba de los Montes ofrece a los carlistas
unas condiciones idóneas para una guerra de guerrillas sin ser aniquilados.
Nuestro pueblo fue unos de los mas castigados de Castilla la Mancha, marcado
por una gran actividad e incidentes en las tres guerras carlistas. De hecho las
facciones carlistas tuvieron muchas veces la ayuda y auxilio de sus habitantes
como campesinos, arrieros , etc.
Algunos vecinos de nuestro pueblo
se unieron posiblemente a estas partidas porque no tenían nada y esperaban mejorar
a través del robo, pillaje y secuestro; aunque fueron detenidos y ajusticiados.
Otros, fueron espías de ambos bandos. Existen testimonios orales en Arroba, de
que los carlistas "sentaban a los que interrogaban en las trévedes con
tizones encendidos como medio de tortura para delatar". Muchos eran
detenidos por parte de los partidarios de Isabel II como espías de los
carlistas, alguno de ellos era absueltos, como les ocurrió al cirujano y al cura
de Arroba de los Montes en 1836.
El auge de las partidas carlistas
se comprende por lo accidentado de nuestra orografía, que forma parte de los
Montes de Toledo y donde sus puertos, sierras, barrancos y hoces les sirven de
escondite cuando se ven amenazadas.
ANTECEDENTES DEL CARLISMO
En 1830 nace la Infanta Isabel,
hija de Fernando VII y de su 4ª esposa MªCristina de Borbón, a la cual nombra
su padre en junio de 1833 Princesa de Asturias y heredera del trono. En octubre
de ese mismo año, tras el fallecimiento de Rey, es nombrada Reina de España
como Isabel II. Basándose en la Ley Sálica de 1735 (durante el reinado de
Felipe V), su tío el Infante Carlos María Isidro, se niega a reconocerla como
Reina de España, a pesar de que en 1829 Fernando VII había hecho realidad la
Pragmática Sanción de 1789, que garantizaba la sucesión directa con
independencia del sexo. Por eso cuando Fernando VII fallece en septiembre de
1833 deja una España dividida en dos amplias facciones que entraron en
conflicto y desembocaría en las llamadas guerras carlistas.
Doña Isabel recibió el apoyo de
gran parte de los políticos moderados, constitucionalistas y liberales. Don
Carlos tuvo el apoyo de los absolutistas tradicionalistas, llamados realistas y
puros religiosos apostólicos.
1ª GUERRA CARLISTA.-
1833-1840.-Estalló en 1833 al fallecer Fernando VII.
En Arroba de los Montes debió de
ser escenario de enfrentamientos con los carlistas, según se deduce de lo
manifestado por Luis Sanchez Ayuso en 1851 al visitador eclesiástico de "
no haber cumplido algunos años desde 1831 con la memoria que Juan de Ayuso había
establecido en 1671, debido a la Guerra Civil de que fue teatro este pueblo,
por lo que tuvo que ausentarse".
Según Eduardo Mariátegui, en su
crónica de la provincia de Toledo, desde el año 1834 empezaron a formarse en
los montes de Toledo partidas carlistas. Los hombres que en los montes de
Toledo levantaron la bandera carlista se dedicaron más a favorecer sus
intereses particulares que los de la causa que defendían. De esta manera tomó
la guerra civil un carácter vandálico e inhumano que perjudicaba a la causa
carlista en Castilla la Nueva, causó víctimas y oprimió a los pueblos pequeños.En
el pueblo de Arroba, en el año de 1834, "por la guerra que el mismo había,
tropas de una y otra parte, destrozaron y quemaron la casa hipoteca que esta al
sitio del Tejar, propiedad de Juliana Turrillo, dejándola reducida a
solar".
Terminado 1834 no se logra organizar ninguna cuadrilla carlista; pero en
1835 se inicia una cierta organización. Los carlista invaden los pueblos mas
alejados y desguarnecidos, condicionado por el factor sorpresa y siempre en
movimiento. Con esta estrategia se aprovechan de los recursos de la zona:
ganado (sobre todo el ganado cabrio tan abundante en nuestro pueblo), miel,
cereales y además le sirve para reclutar hombres de la comarca para su causa.
Las acciones bélicas se reducían
generalmente a la toma de una localidad durante algún tiempo y tras acaparar
armas, dinero y provisiones, salir de ella hacia refugios seguros para evitar
el enfrentamiento con grandes contingentes de tropas gubernamentales, sobre
todo en la primera guerra carlista. La prensa en
CLM (características y estructura 1911-1939). Isidro Sánchez Sánchez.
La geografía provincial jugará un papel decisivo y los Montes de Toledo fueron el núcleo principal de formación, reunión y operación de estas partidas. El carlismo más que un problema de sucesión representa dos concepciones contrapuestas de cómo debía ser y funcionar la sociedad y donde el problema de la tierra era un punto principal. En Ciudad Real el carlismo tuvo un gran desarrollo, pero le perdió su individualidad, su desunión.
En la provincia de Ciudad Real,
las facciones carlistas contaron con el apoyo y auxilio de un sector
mayoritario de su población: alcaldes y jueces, el clero, que veía peligrar sus
privilegios debido a la política desamortizadora llevadas a cabo por Isabel II
y clases más bajas: campesinos, carpinteros, herreros, carreteros, sastres, etc.
y también bandoleros y asaltadores. Ello se debe a que la fuerza de la Iglesia
y la aristocracia terrateniente era considerable. Era una sociedad estamental
que ve peligro de desestabilizarse con el triunfo del liberalismo y quiere
proteger sus privilegios. El liberalismo sacrificó los intereses de los
campesinos y muchos labriegos se levantaron en armas contra una revolución y
una reforma agraria que se hacía a sus expensas, por lo que se encontraron al
lado de los enemigos de estos cambios y defensores del Antiguo Régimen: los
carlistas.
Las fuerzas usadas para perseguir
a los Carlistas fueron el ejército, la milicia nacional o cuerpo de urbanos de
los pueblos, las partidas de tiradores, los migueletes de la Mancha, la Guardia
Civil y el cuerpo de carabineros.
En la 1ª guerra carlista, los
facciosos que se capturaban o presentaban, eran juzgados militarmente y
posteriormente fusilados. La represión contra los carlistas la llevó en su
mayor parte el Ejército. Había ocasiones en las que no se hacía un juicio
previo a la ejecución, sin que eran fusilados en el acto, en el mismo sitio de
su captura.
En diciembre de 1837 D. Basilio
García emprende una nueva expedición carlista de mayor intensidad que la
realizada en junio de 1936: 4 batallones, 2 escuadrones y un cuadro de
oficiales de caballería. El 14 de marzo de 1838 y tras un encuentro en Valdepeñas
con la columna del mariscal isabelino Jorge Flinter, tuvo importantes bajas y a
finales de abril, la expedición se siente tan acosada que se divide en 3
secciones cada una con un jefe: Basilio, "Palillos” y Fulgoso, que señalan como
punto de reunión Arroba de los Montes y Alcoba.
Las partidas Carlistas que
estaban en los Montes de Toledo saquearon Trujillo en 1835 y Castilblanco en
1836. Estas acciones violentas de las partidas desencadenaron la represión por
el ejército liberal.
El coronel D. José Avecía, comandante general
de la columna sobre la línea de la Mancha, al que el día 8 de agosto de 1835 se
le unió una columna de la Mancha de 150 infantes y 60 caballos, se encaminó al “Valle
de las Hoces”(denominado actualmente Valdecristo
situado entre Arroba de los Montes y Puebla de
Don Rodrigo, actualmente localizado en la Finca de Riofrio perteneciente a la
Junta de Comunidades de Castilla la Mancha), para buscar al rebelde Mir y
otros cabecillas que se habían reunido allí.
"El valiente coronel Abecia con la columna de su mando, ha marchado a los valles de las Hoces, en la provincia de las Mancha, en busca del rebelde Mir y otros cabecillas que volvían a reunirse. Al llegar a aquel punto encontró a los facciosos en numero de 40 caballos capitaneados por Peco y Perfecto, quienes huyeron vergonzosamente al avisarles sus vigías la proximidad de nuestras tropas. No obstante la celeridad de su fuga y lo escabroso del terreno, todavía fueron alcanzados por una guerrilla de Seguridad publica y los oficiales de caballería de la Reina D. Juan Mundi y D. Joaquín Fernández; habiendo muerto un rebelde, herido varios, y recogido un caballo. Los restantes se escondieron en sus guaridas ordinarias entre la espesura del monte. Se ha dado ordenes al capitán Barragan para que incendie las malezas que sirven de asilo a la canalla, y donde depositan los efectos que han sido presa de su latrocinio. El mismo les había cogido una partida considerable de trigo, y la actividad con que se les persigue no les dará lugar a reponerse de sus continuas perdidas capeando que muy en breve desaparezcan estos miserables vestigios de la estúpida rebeldía.
El coronel Abecia celebra y encomia el entusiasmo de la tropa de su mando y manifiesta asimismo que del incendio y registro escrupuloso de las guaridas de la facción, hecho por el capitán Barragán, se promete hallar municiones de la boca y guerra que deben tener ocultas en lo recóndito de sus cuevas. Una columna de 200 hombres, procedentes de la provincia de la Mancha, se han unido a la muestra, y el exterminio de los pocos miserables que aun vagan errantes por la aspereza de la Sierra, será consecuencia forzosa del celo de nuestro jefes, entusiasmo de la tropa y cooperación de los pueblos. Constantes las partidas de tropa y urbanos en perseguir los restos de la gavilla de Sánchez León, diseminados en el partido de Plasencia, sorprendieron a dos de aquellos miserables cerca de Cabezuela, quienes haciendo resistencia fueron muertos en el campo" Boletín de la Diputación de Badajoz
A raíz de esta persecución son muertos Mir y Merino, según el boletín de la diputación de Badajoz dice "El rebelde e infame Merino ha sido aprendido y fusilado y el ex-brigadier Mir, comandante de las hordas facciosas de la Mancha".
"Capitanía general de Castilla la Mancha. El comandante general de la Mancha en oficio fecha de ayer, que acabo de recibir, me dice lo que sigue: "Acaba de llegar la columna al mando del capitán ayudante mayor del regimiento provincial de Córdoba Don Francisco Javier Pardillo, compuesta de 60 soldados del mismo y 40 caballos del 2º ligero, trayendo el cadáver del cabecilla Mir, muerto ayer a las 10 de la mañana por la expresada columna, que después de andar 14 leguas, sin mas descanso que el preciso para comer un rancho, alcanzo la facción en los cortijos de la fuente del Fresno, donde la batió y disperso los restos que pudieron salvarse a favor de la escabrosidad del terreno." 31 de Agosto de 1835, Madrid.
Entrada del Estrecho de las Hoces por Arroba de los Montes junto con la tabla de la Murciana |
En su marcha encontraron a los carlistas (facciosos) Perfecto y Peco con unos 40 caballos, los
cuales estos huyeron en cuanto sus vigías descubrieron a las tropas
isabelinas. Les dio alcance una guerrilla de seguridad pública y dos oficiales
de caballería de la Reina, que no pudieron continuar la persecución por el mal
terreno, pero mataron a uno, varios resultaron heridos y se les apresó un
caballo. El capitán de la 2ª compañía de seguridad Don Pedro Barragán les cogió
una partida de trigo, y tenía orden para incendiar las malezas que sirven de
guarida á los rebeldes. Estas expediciones serán repetidas con frecuencia para
no dejar a que la facción se aprovisione, ni repare sus pérdidas. La
Revista española (Madrid) 18-8-1835.
Ante esta ofensiva carlista, el día 2 de Noviembre de 1835, la Comisión de Armamento y defensa de la Provincia de Ciudad Real crea un cupo de 2296 hombres entre los pueblos de la provincia que será de la proporción del numero de almas que en cada uno habita, tomadas del censo mas reciente que se ha formado por el gobierno civil correspondiendo a Arroba de los Montes con 401 habitantes el cupo de 5 soldados.
Seis meses después, en enero de
1836, aún no han podido acabar con las facciones de las Hoces(cerca de Arroba
de los Montes). Las gavillas de Peco, Tercero y Orejita, guarecidas
aquí hacen sus incursiones en los montes de Toledo y Mancha Alta, aprovechando
la aspereza del terreno del cual les resulta a las tropas isabelinas casi imposible sacarlas, pues cuando penetraban las tropas en
el centro de las Hoces incendiándoles
los pequeños campamentos que en ellas tenían y montes inmediatos, la facción se
dispersaba en muy pocas partidas.
"Lleno de ocupaciones y planes para acabar con esta canalla, tomo la pluma para decir a Vd. que sabiendo que Tercero y Peco con 80 caballos y 150 infantes se hallaban en Arroba y sus inmediaciones, me determiné en el momento marchar en su busca. Sali de Agudo a las tres de la tarde del 7 de Enero de 1836, llegué de noche a la Puebla, la cerqué para que nadie saliese ni avisase al enemigo de mi marcha, recogí toda la gente en la Iglesia, llevé conmigo el ayuntamiento, y a las 12 de la noche lloviendo terriblemente, emprendí mi marcha por las escabrosas montañas que van a Arroba, las Hoces.
Yo marche con 200 infantes y 25 caballos por el terrible desfiladero del Chorro y los demás por otro camino malísimo.
A las tres de la madrugada entré en el pueblo. Después de tomar todas las avenidas; dejando una compañía al pie de las Hoces para cortar su retirada: mas desgraciadamente solo cogí ocho facciosos y una yegua, diez fusiles, un estoque y el bastión de Peco.
Mi marcha tan rápida y atrevida por medio de sus montañas impondrá a la facción y a los pueblos y producirá el buen efecto de que no se acercarán al punto en que estoy, pues saben que les buscaré adonde quiera que estén. Es preciso castigos. La facción está en los pueblos, como Vd. verá por los grandes descubrimientos que he hecho en mi viaje. Voy a fortificar esté punto importante mañana y dejaré en él una fuerte guarnición. Yo no sé como hasta ahora no se ha atacado a los enemigos en su propio país, pues es el modo de hacer la guerra.
Yo aseguro a Vd. que no han de entrar ya en Extremadura pues yo les buscaré adonde quiera que estén. No puedo más pues yo fui sin ropa ni nada a la montaña y solo tengo lo encapillado y estoy mojado. Jorge O. Flinter. La tropa muy entusiasmada se ha portado bien, pues una marcha de ocho leguas de noche y lloviendo no es una friolera" Boletín Oficial de Toledo. ARROBA 10 de Enero de 1836.
De Arroba se fue Flinter a Villarta de los Montes y de ahí salía a los Montes de Toledo a buscar forajidos y apoderarse del trigo que tienen oculto y el día 14 de Enero del 1836 cogen en Arroba de los Montes 50 fanegas de trigo.
A la vista de los escasos resultados, abandonan el plan indicado y se
decide acosar de hambre a los carlistas prohibiendo pastar ningún ganado en los
Montes de Toledo, en el sitio llamado de la Cuadrilla, en las dehesas de
Alcudia y montes de Villarta, haciendo llevar los que hay ahora a la Mancha
baja o al interior de esta provincia, donde había cabida para estos ganados.
Situaron las tropas de Toledo y la Mancha a la salida de estos montes y las que
manda el Coronel Flinter permanezcan en los puestos que ocupan en Siruela y
Herrera. Los pocos pueblo que hay en los montes indicados ( Arroba de
los Montes y otros) no tienen recursos y por tanto los carlistas tendrían
que salir a terreno despejado, donde podrían ser destruidos por las tropas o
morirían en las guaridas, ya que evacuado el ganado y las majadas, solo podrían
entregarse o perecer.- 26 de enero de 1836.- BOP 28/1/1836.
Un enclave primordial, es el Estrecho de las
Hoces del Guadiana, que en Arroba de los Montes cuenta con un
fuerte, ya derruido, pero que aún conserva parte de los dos torreones de la
parte Oeste que mira hacia el estrecho, llamado ahora La Casa Grande de Majada
Alta, que se empieza a construir el 8 de Enero de 1836 "Voy a fortificar este punto importante mañana y dejaré en él una fuerte guarnición" Jorge O. Flinter , al igual que el de Fuente
el Fresno y Fernancaballero.
El 11 de enero de 1836, tras haber recibido todos los auxilios de la
religión, fueron fusilados por la espalda en la plaza de Villarta: Tiburcio Ramírez,
natural de Agudo; Eusebio Fernández y Antonio Herance, de la Puebla y Blas
Calderón, de Arroba de los Montes, tras haber sido juzgados
por una comisión formada por un comandante y seis capitanes. Resultaron
convictos y confesos del delito de formar parte de la facción armada que
acaudilla Cándido Tercero y Mariano Peco y de haber derramado sangre en
Villarta el día 6 de mayo de 1835. Se trata de un castigo ejemplar para
atemorizar a los Carlistas y dar confianza los pueblos de la frontera con
Extremadura. El Eco del Comercio. 24-1-1836.
Existía un Blas Calderón que estaba casado con Francisca Gómez-Garralda
Herance y tenía 4 hijos: Salustiana, Brígida, Felicia y Fermín.
El Coronel Jorge D. Flinter, el día 29 de enero de 1836, de camino a
Villarta sorprendió al faccioso cirujano Matías Bermejo, en Arroba
de los Montes, y el día 31 juntamente con el presbítero don
Juan Romero y la prima del cabecilla Peco, Manuela Cano, remito todos tres á la
disposición del capitán general á Badajoz, cogieron a la facción 33 fanegas de
trigo más. La revista española. Madrid. 13.2.1836.
Después el cirujano y el Cura
continuaron con su labor cotidiana, pues Antonio Romero certificó una defunción
unos días después el 9 de Febrero de 1836 y ejerció allí hasta marzo de 1847 y
el barbero y encargado de la Salud Pública, Matías Bermejo González, natural de
la Puebla de Alcocer, murió en Arroba el 20.10.1845 a los 57 años de afección de
pecho e hidropesía.
El comandante General de la
provincia de Ciudad Real D. Pedro de la Peña, en la única expedición que hace
en los pueblos de la cuadrilla, ha privado a Tercero de los tres espías de su
confianza en Arroba de los Montes y Porzuna, asalariados cada
uno con un duro diario. Bop 18/2/1836
Después de la derrota de Orejita por la columna Reyter, se inicia una persecución del faccioso Palillos en el verano de 1837 cuando se dirigía a Extremadura. "Calculando que se dirigían a los Montes de Toledo por el de la Mancha y a media noche salí de Herrera a Fuenlabrada de los Montes, Puebla de Don Rodrigo y Arroba. Al avistar este ultimo pueblo salían unos cuantos de el a todo escape, y como hicieron un disparo me enteré de que el grueso no estaría muy lejos. En efecto al descender al pueblo y aunque a mucha distancia fue seguido aquel hasta Peñas Pardas y montes del Cortijuelo (Portijuelo), sin mas razón que desbandarlos, lo unos por la enorme distancia que nos separaba y en razón a ser ya de noche. Hoy he marchado desde Arroba a esta en donde estuvieron por la mañana, y aunque se detuvieron muy poco se que entre ellos hubo desavenencias y alborotos, exasperados con el poco fruto de la expedición que sin duda les habían decantado mucho, y ofrecido robar a manos llenas, resultando que cada cuadrilla de ladrones de que se componen esta chusma parece iba decidida a marchar a su respectivo país. Ningún resultado material ha ofrecido esta expedición costosísima seguramente para la tropa, que en ella me ha dado una nueva prueba de su sufrimiento y patriotismo" BOP de Ciudad Real, 15/10/1937
Después de la derrota de Orejita por la columna Reyter, se inicia una persecución del faccioso Palillos en el verano de 1837 cuando se dirigía a Extremadura. "Calculando que se dirigían a los Montes de Toledo por el de la Mancha y a media noche salí de Herrera a Fuenlabrada de los Montes, Puebla de Don Rodrigo y Arroba. Al avistar este ultimo pueblo salían unos cuantos de el a todo escape, y como hicieron un disparo me enteré de que el grueso no estaría muy lejos. En efecto al descender al pueblo y aunque a mucha distancia fue seguido aquel hasta Peñas Pardas y montes del Cortijuelo (Portijuelo), sin mas razón que desbandarlos, lo unos por la enorme distancia que nos separaba y en razón a ser ya de noche. Hoy he marchado desde Arroba a esta en donde estuvieron por la mañana, y aunque se detuvieron muy poco se que entre ellos hubo desavenencias y alborotos, exasperados con el poco fruto de la expedición que sin duda les habían decantado mucho, y ofrecido robar a manos llenas, resultando que cada cuadrilla de ladrones de que se componen esta chusma parece iba decidida a marchar a su respectivo país. Ningún resultado material ha ofrecido esta expedición costosísima seguramente para la tropa, que en ella me ha dado una nueva prueba de su sufrimiento y patriotismo" BOP de Ciudad Real, 15/10/1937
En Arroba, hay datos que se
refieren a los enterramientos:
El 23 de diciembre de 1834 es
enterrado en la Ermita de San Miguel, Simón
Cano (voluntario de Isabel II) que falleció a las 8:00 de la noche del día
anterior de un balazo en acción de guerra. Estaba casado con Francisca Jiménez,
ambos naturales y vecinos de Talarrubias.
Una columna de la Reina Isabel
del puesto de Arroba de los Montes al mando de un Comandante,
el día 21 de julio de 1836 dispararon y mataron a las 11:30 en el Camino de
Guadiana, cerca de la población a dos arrobeños Carlistas que
iban armados:
-Tomás Gutiérrez
Martín de Mariana, soltero, hijo de Pedro Gutiérrez Parreño (hijo de Pedro y
Ramona) y Jesusa Martín de Mariana Felipe (hija de Francisco Javier y María).Tenía
al menos 4 hermanos, Miguel, José, M.ª Teresa, de 13 años y León, de 8 años.
-Juan Cruz Martín de Lope Sánchez
Fernández, soltero, hijo de Gregorio Martín de Lope Sánchez y Manuela Fernández
Palomo (de Villarta). Tenía dos hermanos, Vicenta y Remigio.
Son enterrados ambos al día
siguiente en el cementerio de la localidad.
El 25 de Septiembre el BOP de Ciudad Real publica el reparto de los 1059 hombres de acuerdo con la comisión de armamento y defensa que le han correspondido a la provincia de Ciudad Real, correspondiéndole a Arroba de los Montes según su población de 401 habitantes el cupo de 2 soldados y medio.
El 25 de Septiembre el BOP de Ciudad Real publica el reparto de los 1059 hombres de acuerdo con la comisión de armamento y defensa que le han correspondido a la provincia de Ciudad Real, correspondiéndole a Arroba de los Montes según su población de 401 habitantes el cupo de 2 soldados y medio.
El 8 de mayo 1838 murió a media
tarde un desconocido carlista que iba armado al rigor de las
armas de las tropas de S. M. la Reina y no pudo ser conocido. Se enterró al día
siguiente.
Al amanecer del día 28 de agosto
de 1838, Esteban Martín Muñoz, fue
ajusticiado y enterrado en el cementerio local de Arroba de los Montes,
por la columna que había en el puesto de Arroba y que se hallaba al mando de un
Comandante. Hijo de Andrés Martín de Navalpino (1794-1860) y de Quiteria Muñoz
Muñoz (1792-1854) (Hija de Francisco y Marcela Teresa) de Alcoba, ambos vecinos
de Fontanarejo. Tenía 6 hermanos: Alejandra (27 años), Luciana (26 años), Juana
(25 años), María (16 años), Josefa (14 años) y Anselmo (11 años).
Fueron fusilados por la tropa de
Extremadura en el cementerio de Arroba de los Montes el día 13
de junio de 1839 tres individuos del
partido Carlista que habían tomado las armas:
-Joaquín Laguna, de Guarnizo
(Cantabria), viudo de Angela Martínez, vecinos de Soria, deja un hijo llamado
Manuel.
-José Maeso, esposo de María
(vulgarmente La Martina), naturales y vecinos de Urda en la Mancha, deja dos
hijas menores llamadas Gregoria y María y dos hijos de tierna edad llamados
Galo y Joaquín.
-Antonio, de
quien se decía era de Málaga.
A la hora de ponerse el sol, en Arroba de los Montes,
del día 24/11/1839, fue fusilado Juan Albalate, casado, de Piedrabuena, por
haber sido aprehendido por el Sr. Comandante de la tropa de Extremadura con
armas en la mano en defensa del partido Carlista.
Antiguo Cementerio de Arroba de los Montes ya desaparecido. |
En enero de 1835 La columna del
capitán Benítez alcanzó una columna de facciosos en Navalpino mató 2 de ellos y
otro en Alcoba. Los demás se dispersaron.
En Navalpino entre 1835 y 1836,
aparecen fallecidos:
a)-12-1-1835. El cabecilla carlista Venancio Sánchez
Balmaseda, soltero, de Miguelturra, murió de un balazo. Alcanzado por el
regimiento de caballería de Extremadura del alférez Joaquín Vergara, que con su
partida de 13 caballos, le alcanzó en las inmediaciones de Navalpino, cuando
aquel había salido de dicho pueblo con 35 hombres entre caballería é infantería,
contra los cuales cargó, quedando muerto el cabecilla Sánchez Balmaseda y otro.
Cogieron dos caballos, algunas armas y otros efectos.
b)-24-2-1836.
Juan Rena de 17 años (hijo de Domingo y Jesusa) de Miajadas, soldado de la 5ª
compañía de tiradores del Batallón de la provincia de Cáceres de Extremadura.
c)-26-3-1836.
Ramón Coronado, casado con Antonia, de 26 años, natural de Villanueva de la
Serena, soldado de la 1ª compañía del 1er batallón de tiradores de la provincia
de Extremadura, murió de dolor de costado.
d)-25-4-1836.
Andrés Casado, de 40 años, sargento 1º de la 8ª compañía del 1ºbatallón de
tiradores de la provincia de Cáceres en Extremadura. Murió de fiebre pútrida.
Era de Salorino (Cáceres).
e)-25-9-1836.
Manuel Macías, soltero, murió en su marcha con otras dos compañías camino de
Villarta de los Montes. Era de Casillas de Coria.
El 7 de Marzo de 1839 se presentan una partida de 10 o 12 latrofacciosos de infantería y llegado a una majada legua y media roban a un vecino de Alcoba 800 cabras que había emigrado de su pueblo y se había instalado en Fuenlabrada de los Montes. Este vecino había huido de su pueblo por "las exigencias y persecuciones que le hacían los facciosos y se había venido y establecido en Fuenlabrada". Inmediatamente del robo la segunda compañía francos de Extremadura de Don Ramon Naranjo con 30 hombres marcha sin perdida de tiempo y "tomase la dirección, que había llevado aquel ganado y sin descanso alguno siguiese hasta lograr su rescate; efectivamente después de andar toda la noche de haber atravesado por inaccesibles terrenos, siguiendo siempre la pista de aquel, logro alcanzarlo ayer mañana cerca del Valle del Cristo(Arroba-Puebla); al otro lado del Guadiana, siendo el resultado el de haber rescatado las 800 cabras sin faltar una siquiera y quedando muerto un faccioso, que por su vestuario y demás indicaba ser oficial, no siendo posible alcanzar a los demás por haberse dispersado y ocultado en los bosques y malezas de aquella sierra".
El comandante de la 2ª columna de operaciones Don Rafael Mayalde el fecha 27 de mayo de 1839 en su marcha desde Arroba de los Montes hasta Piedrabuena persigue y fusila a los carlistas, Santos Benítez, natural de Piedrabuena, de unos 34 años, casado con Petronila Espinosa y Ramón Cortes, de Pozuelo de Almagro, de unos 30 años, esposo de Eugenia Nielfa, aprehendiendo las armas que llevaban.
En la madrugada del 18 de Agosto de 1839, el comandante del destacamento de Villarta de los Montes cayó por sorpresa en Arroba, logro dispersar y batir a 7 facciosos a caballos y varios a pie, capitaneado por un tal "Panza Rubia". No pudiendo hacer mas porque estos facciosos habían recibo aviso previo de su llegada. B.O. P. Badajoz 29/8/1839
Continuando con la estrategia de quitar recursos y auxilio a los
Carlistas, en un bando de 25 de agosto de 1839, Trinidad Balboa, comandante
general de las provincias de Ciudad-Real y Toledo, además de instrucciones sobre movimiento de ganado y habitantes
de los municipios de ambas provincias, indica que ninguna persona bajo ningún
motivo ni pretexto, puede entrar en los montes de Yébenes, Guadalerza, Consuegra,
Urda, Madridejos, Puerto Lapice, Villarrubia, Fuente el Fresno, Malagón,
Fernancaballero, Picón, Piedrabuena, Porzuna, Arroba de los Montes,
Navalpino, Fontanarejo, Alcoba, Horcajo, Navas de Estena, Retuerta, San Pablo,
Castañar, Marjaliza, del Duque y de la Jara, ya que si se encontrare en
cualquiera de estos montes, será pasado por las armas. Esta prohibición fue
levantada en noviembre de ese mismo año al huir el Cabecilla Palillos de
ambas provincias cuando fue desecha la facción que dirigía.
El 25 de agosto de 1839, D.
Trinidad Balboa, Comandante
general de las provincias de Ciudad-Real y
Toledo, emite un Bando que se
deberá fijar en la puerta de los Ayuntamientos y pregonado en las plazas y
calles, mandando entre otros lo siguiente:
- Que
ninguna persona, bajo ningún motivo entre en los montes correspondientes a los
pueblos de la Jara y de los Montes de Toledo (entre ellos Arroba), bajo amenaza
de ser pasados por las armas.
- Todos los habitantes, podrán libremente transitar
solamente a media legua de circunferencia del pueblo.
- Para viajar o transitar fuera del dicho radio, pedirán
los interesados a la autoridad competente un pase en el que conste el punto de
destino y motivo de salida.
- Los
labradores que tengan que trabajar en terrenos que pasen del radio de media
legua y pernocten en él algunos días, se les podrá dar un pase especial con el
nombre del terreno o caserío, fecha de expedición y de caducidad.
- El
vendedor y comprador de ganado ha de llevar un papel donde conste las señas del
ganado que se vende o cambia autorizado por el Alcalde, en caso contrario se
perderán las reses y el valor se aplicará a la tropa.
Finalmente, en este bando,
proclama el indulto a todo faccioso que se le presente hasta el 2 de octubre de
1839, abjurando de sus errores y crímenes.
Según el parte dirigido por el Comandante General de la línea de la Mancha desde Arroba, con fecha 27 de Octubre se han presentado en dicho punto a indulto los individuos que comprenden la adjunta nota, los cuales lo han verificado con armas y caballos. Siendo:
-Manuel Diez, Manolo, natural de Horcajo con caballo, tercerola y canana.
-Francisco Sánchez, El extremeño, natural de Villanueva de la Serena, con caballo y canana.
-Antonio Torrado, natural de Alconera, con yegua y tercerola.
-José Tajador, natural de Calamonte, con fusil y canana.
Al final de la primera guerra
Carlista, que terminó en 1839 con el convenio de Vergara, por la reconciliación
de los ejércitos liberal y carlista, se produjo una especie de amnistía para
los soldados de ambos ejércitos, que acogiéndose al indulto podían volver a sus
domicilios. En la primera semana de agosto de 1940, se presentaron en Arroba
de los Montes implorando la gracia de indulto los individuos:
-Manuel Gómez y Jerónimo Pérez,
de Miguelturra.
-Alvaro Martin, de Piedrabuena.
-Alférez, Francisco Jordán, y el
Presbítero. D. José Benavente, del reino de Granada.
-Una mujer
En 1940 había un destacamento militar en Arroba de los Montes, y siguen presentándose carlistas para solicitar el indulto. El día 2 de Agosto de 1940 el 1º capitán comandante de la columna de los Montes se presenta al comandante del destacamento de Arroba "impetrando indulto oficial, un capellán y tres facciosos, todos procedentes de la de Cipriano, los tres últimos conocidos por sus latrocinios, llamado Mochila, Gómez y Peco"
El 16 de marzo de 1842, cuatro hombres a pie y
armados se presentaron en el collado del Prisco e iban hacia las veredas que
cruzan a las Hoces del Guadiana y Valdecristo. Al día siguiente, el Alcalde
Constitucional de Navalpino dispuso la salida de ocho escopeteros en su
persecución. Esta batida no produjo resultado, aunque los nacionales de Arroba
de los Montes, los tirotearon y persiguieron en dicho Valdecristo, también
sin resultado por lo avanzado de la noche. A consecuencia de este suceso, existe actualmente un topónimo en la proximidad de la vereda de las Hoces, su nombre es el Postuero de los Facciosos, en la finca de la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha, llamada Finca de Riofrio.
Senda de las Hoces entre Arroba y Puebla en un mapa de 1886, por donde cruzaron los carlistas en Marzo de 1842 |
2ª GUERRA CARLISTA.- 1847-1849.- Se produjo cuando Carlos Luis de Borbón (hijo de Carlos María Isidro), conde de Montemolín, pretendiente de Isabel II y de la Corona, en el año 1847, se hizo llamar rey con el nombre de Carlos VI.
En Peñas Pardas (Arroba), el 25 de mayo de 1848,
fueron vistos seis desconocidos,
armados y montados; dos
de ellos como de 36 años de edad, vestidos de paño pardo, con barba muy
crecida, bombachos al estilo manchego;
tres sin bozo (1), como de 20 años, vestidos como los anteriores, y el otro como de 30 años, vestido con
pantalón y dolmán (2) de paño negro.
(1) Vello que apunta a los jóvenes sobre el labio superior
antes de nacer la barba.
(2) Chaqueta de uniforme con adornos de alamares y vueltas de
piel, usada por ciertos cuerpos de tropa, principalmente los húsares.
El 15 de Julio de 1848 pasan la partida de Peco que matan al estanquero de Arroba de los Montes "por lo que tengo el gusto de leer en todos sus números, veo que tiene la mas exactas noticias de todas las provincias; de esta no extraño que nada haya dicho, porque nada ha ocurrido hasta hace seis días que aparecieron en Agudo y Saceruela, los que días pasados nos anunciaron Vds. pasaron por Cáceres, y que acaso intentarían alguna incursión hacia esta provincia.
En circunstancias como las actuales me creo en la obligación de tomar la pluma en obsequio de esta desgraciada provincia, por si algún tanto puedo contribuir a conjurar el mal que nos amenaza.
Cuando nos figuramos que la facción de Peco según unos, Royo, según otros, no pasarían a estas inmediaciones, nos hallamos anoche que habían pasado a hora muy avanzada como unos 40 caballos por Arroba de los Montes, donde quisieron fusilar al estanquero por haberle negado el dinero y existencias; de aquí pasaron a Porzuna donde tomaron raciones y cuantas monturas había, despreciando dos jacos que no correspondían a los suyos; al estanquero le exigieron los fondos y existencias, dándole recibo firmado por un tal Vázquez y las Decimas. Su traje se compone de pantalón blanco y franja encarnada, chaqueta de grana, boina encarnada, si bien para el sol usan sombreros de ala ancha.
Del país solo los acompaña tres o cuatros, lo que prueba bastante que el país no está para nuevo compromisos, que más tarde o más temprano le cuestan caro
El gobierno no debe descuidar estas partidas de doce o catorce hombres, que como en la pasada lucha nada decían en su principio, y al poco tiempo causaron el terror de columnas, compuesta de aguerridos y veteranos soldados. El jefe político ha adoptados varias medidas: entre otras, hace responsables a los dueños de los caballos, si los facciosos se los quitan de sus hogares en un camino.
Se ha mandado recoger toda clases de armas, aunque no creo se verifique por mandarse a los que defiendan. El medio mas oportuno en este caso sería que en los pueblos de la falda de la sierra se destacasen pequeñas columnas de infantería, y alguna fuerza de caballería los persiguiese y no les permitiese salir al llano, con lo que tendrían que abandonar esta provincia.
Se han mandado cerrar las puerta de esta ciudad, y los portillos también se han tapiado con fin de prevenir alguna sorpresa"
La
partida de Peco con treinta hombres hizo parada a mediados de julio de 1848 en Hontanar y en Navalpino, llevándose un caballo que
pagó á buen precio. Partieron luego hacia Yébenes.
La situación es tan peligrosa en la provincia de Ciudad
Real y Toledo por la que se establece el estado de excepción en ambas
provincias por el bando del 20 de Septiembre de 1848 “Considerando la
situación particular en que se hallan las provincias de Ciudad Real y Toledo, y
la necesidad de vigorizar la acción de la Autoridad militar para poner un
termino a los males que producen en ellas las gavillas de bandoleros que
abrigado en la escabrosidad de sus montes, siembran la alarma y la agitación en
los pacíficos pueblos a quienes amagan con sus desmanes, he tenido a bien
decretar lo siguiente: Art. 1º Las provincias de Ciudad Real y Toledo quedan
declaradas en estado excepcional..”
La facción de Bermúdez invadió Navalpino el 1
de marzo de 1849, allí se le unió el vecino Eusebio Carranza (BOP)
En 1850, a las circunstancias de la guerra carlista se le unió la corta cosecha de frutos en Arroba de los Montes.
Según el Teniente de Alcalde, Luis Sánchez y el Escribano del Ayuntamiento
de Arroba de los Montes, Ramón López, (BOP de
23/6/1849) le fueron robados e inutilizados a los vecinos de este pueblo por
los carlistas:
ESPECIE
|
CANTIDAD
|
Pollinos
|
5
|
Yeguas, potro y mula
|
4
|
Ovejas y corderos
|
189
|
Cerdos
|
7
|
Vacas, novillos , becerros, eralas
|
15
|
Cabras y chivos, cegajas y primalas
|
1.095
|
Colmenas
|
3.354
|
Trigo
|
170 fanegas
|
Cebada
|
144 fanegas
|
Centeno
|
20 fanegas
|
Garbanzos
|
1 fanega
|
Panizo
|
4 fanegas
|
Escopeta
|
1
|
Correspondiendo a los siguientes
vecinos por cantidades:
VECINO
|
CANTIDAD EN
REALES VELLON
|
Cantidades
Liquidadas y reconocidas en Diciembre de 1959
|
Mauricio
Martínez Gómez
|
2.350
|
2.820
|
Agustín Sánchez-Camacho
Mendiola
|
23.098
|
24.631
|
Francisco
Martín
|
37.246
|
40.584
|
Tomás Gutiérrez
|
3.566
|
4.823
|
Julián Ayuso
Domínguez
|
550
|
550
|
Pedro Martín
|
500
|
500
|
Remigio
Martín de Lope Sánchez Fernández
|
864
|
864
|
Pedro Pascual
Turrillo
|
1.916
|
1.916
|
Julián Martín-Ceballos
Torres
|
2.100
|
2.100
|
Jacobo Martín
de Mariana Lázaro
|
340
|
713
|
Adrián
Herance Ortega
|
962
|
1.238
|
Francisco
Pascual
|
1.060
|
1.571
|
Nicolás
Parreño Lázaro
|
1.646
|
2.295
|
Tomás Torres
Sánchez
|
890
|
890
|
Juan Martín
de Mariana Maeso
|
720
|
720
|
Eusebio López
Fernández
|
8.260
|
9517
|
Viuda de
Julián Sánchez
|
300
|
|
Gila Bodas
Herance
|
540
|
540
|
María Mendiola
|
2.040
|
2.040
|
Carlos Martín
Ceballos
|
180
|
|
Luis Sánchez-Ayuso
Arados
|
1.442
|
2.975
|
Dionisio
Domínguez Maeso
|
200
|
|
Francisco
Ceballos
|
210
|
|
Gregoria
Parreño Lázaro
|
7.298
|
7.947
|
José Martín,
mayor
|
4.400
|
8.741
|
Pedro Sánchez
Camacho
|
672
|
672
|
Alfonso
Gutiérrez
|
1.400
|
1.400
|
Baldomero
Fernández Martín de Lope Sánchez
|
560
|
560
|
Gregorio
Camacho
|
2.008
|
2.008
|
Gregorio
Ortega Gutiérrez
|
2.200
|
2.573
|
Sebastián
Sánchez de la Cuadra Ayuso
|
4.664
|
4.664
|
Higinio
Fernández Díaz
|
2.534
|
4.164
|
Antonio
Ortega
|
3.540
|
3.913
|
Obdulia
Campos
|
3.160
|
3.160
|
Hilario
Ortega Martín
|
824
|
824
|
Patricio
Bodas Herance
|
60
|
|
Juana García
Gutiérrez
|
900
|
900
|
Jacinto Ruiz
Martín de Mariana
|
160
|
|
León Herrera
Felipe
|
104
|
1.555
|
Ramón Martín
|
300
|
811
|
Pedro Carazo
Muñoz
|
180
|
553
|
Juan de Dios
Gutiérrez Romero
|
60
|
433
|
Faustina
Chaparro
|
500
|
1.011
|
Félix
Gutiérrez
|
100
|
100
|
Teodoro Ruiz-Espinosillo
Sánchez-Camacho
|
200
|
849
|
Viuda de Juan
Martín de Lope Sánchez, Josefa Martín de Esteban Martín
|
2.180
|
5.470
|
Julián Muñoz
Márquez
|
1.472
|
1.472
|
Lucio Ruiz
Valero
|
262
|
1.672
|
Juan Miguel
Herance Díaz
|
3.200
|
3.711
|
Inés
Rodríguez Velasco
|
580
|
1.091
|
Antolín Torres
Sánchez-Cuadra
|
600
|
1.111
|
Justa Laín
|
312
|
|
Joaquín López
Donaire
|
10.900
|
12.342
|
Capellanía de
Mudarra
|
1.080
|
|
Antonio
Romero Céspedes (Cura)
|
4.322
|
5.660
|
Baltasar
Martín Jiménez
|
96
|
|
Nicolás
Martín de Mariana Gutiérrez
|
436
|
947
|
Lorenzo
Fernández Turrillo
|
470
|
|
Antonia
Martín-Ceballos Romero
|
50
|
|
Ermita de San
Miguel demolida
|
6.002
|
|
Pósito demolido
|
10.000
|
|
Rescate de la vacada del Concejo, exigido por Cepeda
|
700
|
|
Fanegas de siembra de cebada comidas por la
facción de Cándido Tercero, Peco y Jara en 1837
|
12.480
|
|
Fanegas de siembra de
trigo comidas por la facción de Facción de Basilio García en 11 días en 1838
|
20.000
|
|
Facción de Tercero en
1835 se llevó la contribución, que
tuvieron que pagar luego los vecinos al Gobierno de Isabel II
|
1.850
|
|
Total
|
203.796 sin
contar el trigo extraído del pósito.
|
181.601
|
Con arreglo a la ley de 1º de Agosto, reglamento de 17 de octubre de 1851 y Real orden de 16 de marzo de 1852, se reconoció y
mandó abonar por la Junta de la Deuda Pública en Marzo de 1859: recibieron los
vecinos en total 181.601 reales.
Ermita de San Miguel de Arroba de los Montes segun un mapa de 1827 que demolieron los carlistas. |
3ª GUERRA CARLISTA.- 1870-1876.- Tras la destitución de Isabel II en
1868, las Cortes eligen a Amadeo de Saboya y Carlos María de los Dolores de
Borbón, sobrino de Carlos Luis de Borbón, quiso disputarle el trono, para reinar
con el nombre de Carlos VII.
Durante 1869, hubo en algunos
pueblos de la provincia de Ciudad Real y de la parte meridional de la de Toledo
pequeños motines y desórdenes, que lograron reprimir las autoridades locales
con el auxilio de la Guardia civil o de los voluntarios de la libertad".
La insurrección fue cundiendo con
rapidez en diversas zonas de la provincia de Ciudad Real, a la cual debían
acudir también los comprometidos en el movimiento que tenían su residencia en
las de Toledo y Cuenca; y aparecieron otras varias facciones por diferentes
puntos.
La columna Tomaseti, en una de
sus excursiones, tuvo noticia de que la facción Polo, la más importante de las
que quedaban, unida á restos de la de Tercero, se hallaba en Fontanarejo, y
haciendo una marcha forjada desde Arroba de los Montes, el 1
de Agosto, logró llegar al pueblo sin ser vista de los carlistas, a quienes
atacó rápidamente, a la vez por ambos flancos y el centro, bastando un corto
tiroteo, que causó algunas bajas a la partida, para derrotarla y ponerla en
fuga hacia los montes de Toledo. Este nuevo descalabro, cuya noticia circuló
con rapidez, aumentó el desaliento de los cabecillas; y convencidos casi todos
de lo inútil de sus esfuerzos, disolvieron sus partidas, buscando ellos su
salvación en la huida.
Las autoridades militares
continuaron con actividad la persecución y organizaron una batida general para
el día 7 de dicho mes, que debían ejecutar las fuerzas de Del Amo, Reina,
Bastos y las de Extremadura, por la Alcudia y los montes situados entre los
pueblos de Agudo, Puebla de Don Rodrigo, Herrera del Duque y Villarta, El
resultado fue hacer algunos prisioneros, y adquirir el convencimiento de que
para restablecer la tranquilidad en el territorio bastaba la guardia civil
apoyada por pequeñas columnas que, bien situadas y haciendo frecuentes marchas,
llevasen la confianza á los pueblos reanimando el espíritu público.
El Boletín Oficial de la
Provincia de Ciudad Real, el 9 de agosto de 1869, publica Circular N.º 47,
firmada el día anterior por El Gobernador, Joaquín de Ibarrola con el siguiente texto:
La partida al mando del cabecilla Polo, activamente perseguida por
nuestras bizarras tropas, se ha refugiado en los montes de Toledo abandonando nuestra provincia. Esta queda ya
completamente libre de partidas carlistas, pues solo restan pequeños grupos,
que temerosos de presentarse a las
autoridades vagan al acaso, y sin
más objeto que evitar su captura, solicitando repetidamente la gracia del
indulto que no puede concedérseles. Estos grupos que no pueden atender a su
manutención, y a los que no es
posible prolongar su existencia en el campo , no tienen más remedio que
presentarse a la autoridad, si los pueblos, comprendiendo, como espero, sus
verdaderos intereses, les niegan la entrada. Para que esto se verifique y con
objeto de evitar sorpresas, recomiendo nuevamente a los Alcaldes, que
establezcan retenes y organicen somatenes como manifesté en mi bando fecha 25
de Julio último.
Los procedentes de la facción que en lo sucesivo se presenten a los señores
Alcaldes, serán puestos por estos con las seguridades debidas a disposición del
Sr. juez de primera instancia del partido, para que por estos sean juzgados de conformidad con e1 art, 13 de la
ley de17 de abril de 1821, hoy
en vigor. Doy gracias a las
autoridades locales, voluntarios de la libertad y personas honradas de los
pueblos que se han prestado a resistir
a las partidas facciosas, y que
con su actitud tanto han contribuido a su
completa dispersión, y les anticipo la expresión
de mi gratitud a todos los Alcaldes, en la
seguridad de que hoy en adelante todos han de oponerse a la entrada en sus respectivos
pueblos de los desalentados y
abatidos grupos, que activamente perseguidos por nuestras incansables columnas
no pueden intentar la entrada en localidades donde comprenden que han de ser
resistidos, por pequeños que estos sean .
Existía todavía en los montes de
Toledo la partida de Polo con restos de la de Sabariego.
Con estos elementos, y queriendo
el Ministro de la Guerra exterminar en breve a la facción Polo, y devolver la
tranquilidad al país, dispuso que en la provincia de Ciudad Real se formaran
tres columnas que operasen en el límite con la de Toledo y persiguieran activamente
a dicha partida para que estrechada entre estas fuerzas y las del brigadier
Izquierdo, cayesen pronto bajo la acción de alguna de ellas. Las columnas
encargadas de tal cometido fueron:
-.la de Tomaseti, de tres compañías de Aragón y algunos caballos de Calatrava, que operó en los alrededores de Malagón.
.-la del teniente coronel Guerra, que batieron el límite de la provincia hacia Fuente el Fresno y Arroba de los Montes, y compuesta de tres compañías de Aragón y una sección de Calatrava
.-la del teniente coronel Andrade, de dos de cazadores de Barcelona y 35 caballos de la guardia civil.
Todas ellas siguieron á Polo en su marcha por las sierras de Toledo, se internaron en esta provincia yendo a sus alcances, y volvieron a la de Ciudad Real donde, custodiando los pasos de una á otra, continuaron operando en las proximidades de Porzuna, Arroba de los Montes, Alcoba y Fuente el Fresno.
En Febrero de 1870 notó se otra vez en Castilla la Nueva la agitación precursora de un nuevo movimiento en sentido absolutista, que el Gobierno de la Nación trató de atajar con rapidez y energía.
-.la de Tomaseti, de tres compañías de Aragón y algunos caballos de Calatrava, que operó en los alrededores de Malagón.
.-la del teniente coronel Guerra, que batieron el límite de la provincia hacia Fuente el Fresno y Arroba de los Montes, y compuesta de tres compañías de Aragón y una sección de Calatrava
.-la del teniente coronel Andrade, de dos de cazadores de Barcelona y 35 caballos de la guardia civil.
Todas ellas siguieron á Polo en su marcha por las sierras de Toledo, se internaron en esta provincia yendo a sus alcances, y volvieron a la de Ciudad Real donde, custodiando los pasos de una á otra, continuaron operando en las proximidades de Porzuna, Arroba de los Montes, Alcoba y Fuente el Fresno.
En Febrero de 1870 notó se otra vez en Castilla la Nueva la agitación precursora de un nuevo movimiento en sentido absolutista, que el Gobierno de la Nación trató de atajar con rapidez y energía.
El 14 de septiembre de 1871
aparecieron en Arroba de los Montes seis hombres vestidos con
trajes de estezado o correales, armados de escopetas de dos cañones, revólveres
y cuchillos de monte. El Gobernador Civil, Sr. Bonifacio Carrasco ordena a los
alcaldes de la provincia, Jefes
de los puestos e individuos de la
Guardia civil practiquen diligencias para su busca y captura y en el caso de ser encontrados, los pondrán a
disposición del Juez de primera instancia de Piedrabuena.
El día 1 de octubre de 1872 entre
Arroba de los Montes y Navalpino tuvo lugar un robo a
Eladio Horcajuelo, Juan García y Celestino Páramo, quitándoles 230 pesetas, 2
jacas, 1 capote, 2 pistolas y otros efectos. Los individuos eran:
-.uno de buena estatura, fuerte,
como de 22 a 24 años de edad, sin pelo de barba,
-.otro de estatura regular,
rubio, pintado de viruelas, como de 40 años, otro de la misma edad, delgado de
cara, moreno y cerrado de barba, otro pequeño, tierno de ojos, cerrado de
barba, y como de 30 años.
Todos vestían calzón bombacho;
botas y blusas, y van armados con escopetas de dos cañones, revólveres,
pistolas y cuchillos.
El 10 enero de 1873 fuerzas de la
guardia civil salieron de Puebla de D. Rodrigo hacia Arroba de los
Montes y Fontanarejo con objeto de cortar el paso a la facción
levantada en provincia de Badajoz.
Miguel Martin y Nieto, Capitán de
caballería y Fiscal militar en Ciudad Real, forma causa a una partida de 17
hombres montados que el día 4 de Mayo del año 1873 se presentaron en Majada Alta término de Arroba
de los Montes y a varias partidas de la zona, entre las que se
encuentran la de 8 hombres desmontados que se presentaron en el pueblo de
Arroba el 12 de Junio de 1873. Estos hombres fueron probablemente los que quemaron el registro civil del pueblo, siendo una practica habitual en la zona ya que también incendiaron el de Luciana y Puebla de Don Rodrigo (Regino Margeliza de Vera).
El 17 de agosto de 1873 a la caída de la tarde, la columna del
Comandante Castaño que se dirigía desde Villarta a Navalpino, compuesta de 26
soldados, un sargento, dos cabos y un oficial del regimiento de Soria y 45
lanceros de España, (En otras fuentes aparece compuesta por 55 lanceros
del Regimiento España, 30 soldados de infantería del Soria y 3 guardias civiles
que servían de guía) atacó a las partidas de Regino Marjaliza
(Comandante General de la Provincia), Merendón, Riego, Picota y otros
cabecillas, que estaban reunidos en Majada alta y tenían 250 caballos, y aunque
la infantería se batió heroicamente, según dicen los mismos carlistas, se
tuvieron que rendir al número, porque la caballería no pudo funcionar como debía
por la aspereza del terreno. La infantería se batió hasta consumir el último
cartucho, como prueba que perecieron seis u ocho soldados de infantería y
herido el teniente, quedando prisioneros 16 soldados, entre los que había 4
heridos, siendo uno el oficial que mandaba la infantería que herido en el pómulo
derecho, se halla en Arroba muy bien asistido. El cabecilla Riego lleva los dos
muslos atravesados. Los carlistas han tenido muy buen comportamiento con los
prisioneros y según dijo el cabecilla Picota, les van a dejar en libertad.
Otros dos soldados heridos han llegado a Navalpino (El bien público 31/8/1873)Ortofoto de Majalta en Arroba de los Montes (se observa restos del fortín de la Casa Grande con sus torres) |
Ante esta derrota de Majada Alta
en Arroba de los Montes, el Gobernador militar de Ciudad Real decía en su parte
oficial que en este hecho desgraciado se había demostrado que el valor era
infructuoso ante la superioridad numérica del enemigo, y que con tal descalabro
se alentaría el partido carlista y se aumentarían las facciones, por lo que
rogaba se le enviase un batallón y 200 caballos, que consideraba necesarios
para la persecución.
Esto era difícil, Madrid tenía
escasa guarnición para las necesidades de entonces y el Capitán General no
pudo, por lo tanto, distraer fuerzas.
Enaltecido el carlista Merendón
con tal victoria, de la que se propuso sacar partido, y queriendo contrarrestar
la influencia de una alocución de la autoridad civil de la provincia, publicó
el siguiente bando:
“En atención al mejor servicio
del Rey nuestro señor (que Dios guarde) D. Carlos VII, y a consecuencia de una
circular, el titulado gobernador de Ciudad Real, en fecha 20 del corriente,
ordena
1-”que los pueblos se resistan
y hagan armas a las fuerzas reales, cuando éstas se presenten, y en la que se
imponen penas y castigos a los contraventores , yo, en uso de las facultades
que las reales Ordenanzas de S. M. me conceden para casos excepcionales como el
presente, ordeno y mando.
Toda población que al
aproximarse las fuerzas de S. M. hiciera resistencia, será incendiada y sujeta
a las condiciones del asalto.
2-Toda autoridad que diera
parte al enemigo de mi proximidad ó permanencia en la población, será pasada
por las armas.
3- Todo individuo que lleve
partes y sea cogido, será fusilado, sin distinción de sexo.
4- Todo padre que impida a sus
hijos incorporarse á las filas de Su Majestad, siempre que éstos lo deseen, será
multado en 6.000 reales.
Todos los jefes de fuerza y
autoridades dependientes de la mía, velarán por el exacto cumplimiento de esta
orden; en inteligencia, que serán sujetos a un consejo de guerra los que no la
obedeciesen. Campo del honor.
Agosto de 1873.
El jefe de Estado Mayor.
Antonio Merendón.
En año 1874 se declara el estado
de guerra en los Montes de Toledo y en otras provincias cercanas debido al
incremento del bandolerismo.
La partida carlista de Basilio
García se disuelve en Arroba de los Montes, en la Casa Grande
de Majada Alta, según testigos repartiéndose" el botín en celemines"(según
el testimonio de Leocadio Laín), pasando luego a Portugal”.
En Julio de 1875 se crea la “Fuerza
de Escopeteros de los Montes” compuesta por 18 hombres voluntarios para
perseguir a los malhechores que se refugian en los Montes de Toledo, cuyo
mantenimiento estaría a cargo de los diecisiete pueblos a razón de un real por
habitante.
BIBLIOGRAFIA:
Libro de Defunciones. Parroquia
de Arroba de los Montes, Navalpino y Piedrabuena.
El Carlismo en la Provincia de
Ciudad Real
Boletín Oficial de la provincia
de Ciudad Real.
Boletín Oficial de la provincia
de Badajoz.
La Revista Española (Madrid)
Narración militar de la guerra
carlista de 1869 a 1876.
Memorias de la iglesia de Arroba
de los Montes
Agitaciones sociales y políticas en la Mancha y Murcia 1858-1927. Aportación documental de los libros correspondencia Audiencia Provincial de Albacete.
Me parece un excelente estudio, que debería ser un aliciente para que otros pueblos de los Montes hicieran lo mismo. Muchas gracias. José A. Dacuña
ResponderEliminarMuchas gracias, tambien sigo tus interesantes trabajos en la revista de la Asociacion cultural Montes de Toledo.
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