Datos personales

Mi foto
Arroba de los Montes, Ciudad Real, Spain
PLATAFORMA CARPETANIA,

viernes, 1 de mayo de 2020

INJURIAS EN ARROBA DE LOS MONTES (1574-1815)

JESÚS VÍCTOR GARCÍA

Las injurias son insultos, calumnias, menosprecios y descalificaciones están dentro de los delitos contra el honor. Estas nos desvelan otra violencia más leve que muchas veces nos anticipa la agresiones y nos manifiesta las tensiones sociales en el mundo rural en los Montes de Toledo.
Las injurias estaban relacionadas en la mayoría de las veces con cuestiones sexuales  por  mancebamiento, vida licenciosa, honra de la mujer, honestidad, cornudo,"marica",  etc.

En los delitos por injurias leves no se iniciaba ningún proceso de oficio solo había una amonestación ya que en estos conflictos no había un daño considerable así como en los problemas domésticos ya que se entendían como privados. Hay un interés especial por estos casos por parte de Toledo pero es de extrañar ya que estas causas no trae consigo ningún ingresos solo conocer las miseria humanas de los vecinos de esta época. Generalmente estas infracciones quedan en una "fe de amistades" o apartamiento donde se retira la denuncia con las correspondientes disculpas y retractandose verbalmente y públicamente.
Injurias por meses en Arroba de los Montes 1574-1815 según Jesus Victor Garcia

Algunas injurias eran en plena calle ,como un vecino de San Pablo de los Montes al cruzarse con un matrimonio y gritó "que hay estaba Mari Puta y Cornavallon, su marido".
En cuanto a la honra de la mujer, muchos mozos despechados proclamaban sus conquistas para desacreditar a su antigua novia como ocurre con un vecino de Marjaliza, llamado Juan Sánchez declara "que él no había de comer lo que otros habían guisoteado y que antes le diera un trabucazo que casarse con ella".

Injurias por honra de la mujer

Predominan las causas por injurias contra la honra de la mujer, "todo el honor de las mujeres consiste en la opinión que de ella se tiene"  según decía Miguel de Cervantes.

La honra y honestidad de la mujer y su familia  tenía que ser incuestionable el dicho de "Puta la madre, puta la hija y puta la manta que las cobija" manchaba a una familia para siempre.

En enero de 1574 hay una Causa por injurias iniciada por denuncia de Baltasar García e Inés Martín, su mujer, contra Teresa Gómez y Lope Sánchez. Los reos, que manifiestan públicamente que la esposa del denunciante está amancebada con otro vecino y que su propio marido los ha sorprendido en la cama. Los acusados son consuegros de las víctimas, y a su vez les acusan también de injuriarlos. 
Algunos mozos cuestionaban la honra de la mujer y retiran la promesa de matrimonio injuriando las con "que él no había de comer lo que otros habían guisoteado" o "que antes le diera un trabucazo que casarse con ella".
En Agosto de 1574 hay un proceso por injurias iniciado por denuncia de Inés García, viuda de Cristóbal García, contra Quiteria García, a la que acusa de decir "que no le sacaban a sus hijas ni sobrinas los rufianes de baxo de las camas, como sacaron a sus hijas de la dicha Inés García". Las hijas, que estuvieron casadas, ya han fallecido, y además Quiteria llama "vieja ruin" a Inés.



Las calles de Arroba eran lugar de conflictos entre los vecinos  Foto Jesús Víctor García
En Febrero de 1618 hay un proceso por injurias abierto de oficio contra Pedro Merinero, mozo, después de que un vecino le denuncie por cantar coplas contra la honra de sus hijas. Los mozos del pueblo tenia la costumbre de rondar a las mozas con cantares obscenos como "Belcebú lleve a Bonete y la madre que parió, que de dos hijas que tenia la una se le casó" o "bonita, rebonita, hija de un gran bellaco, tu te estas en esa cama y en este charco".


Los maridos y hijos salía en la defensa de la honestidad de su esposa o madres, en Arroba de los Montes un barbero agredió en 1622 a una vecina porque había cuestionado la honestidad de su mujer "se quitó la pretina y probó alzarse las faldas para azotarla, y no pudo y la dio muchos cintazos encima del hato y la arrastró de los cabellos y la metió en unos zarzales". En noviembre de  1815 el marido de Eugenia Martín denuncia a Maria Eugenia de los Santos por haber insultado a su mujer

Los hijos defienden la honorabilidad de sus madres al faltar su marido, como ocurre en Enero de 1614 hay "un proceso en visita por injurias" iniciado por la denuncia de Miguel García por decir Juan del Castillo en la calle que su madre " es una gran borracha y ladrona que tiene hundida la hacienda del padre".

En Junio de 1623 hay un proceso por injurias iniciado por denuncia de Cristina Ruiz, viuda, contra Juan Gutiérrez, a quien la denunciante acusa porque ha dicho públicamente que se ha acostado con ella.  

Había un rechazo social a los hombres que no defienden la honestidad de sus mujeres "Los que consienten que sus mujeres sean putas tienen pena de ser emplumados, untados de miel con coroza y ristras de ajos y cuernos en vergüenza pública, y por postre presidio o galeras por ley más moderna que la que manda que sea azotado por su propia mujer, paseando en borrico por las calles públicas con la coroza, ristras y cuernos". 

En marzo de 1673 hay una causa por lesiones e injurias abierta por denuncia de Juan Jiménez contra Polonia García, que golpea y agrede al hijo del denunciante, de once años, y dice que su esposa"era una puta, ella y todas las que entraban en la casa del cura , y los hombres eran unos cornudos". Además la dice que "es una puta cortadora descendiente de cortadores, mesonera y mesonerilla de mierda".
Llamar puta era y es lo más común cuando se intenta denigrar a las mujeres, según el Diccionario de Autoridades de 1737, puta es "la mujer ruin que se da a muchos" y viene de putida porque "siempre esta calentada de mal olor". En Julio de 1801 un padre denuncia a un mozo llamado Manuel el platero por llamar a su hija "puta" y esta le rompe el abanico con el que estaba dando aire.

En Noviembre de 1674 hay un proceso por injurias abierto en Toledo de oficio contra Francisco Ruiz, que ha sido rechazado por María Sánchez de Rodrigo, mujer casada, pero que se jacta en público de que "demás de a verla él gozado tiene otros galanes, y con mal  ánimo se lo ha dicho al dicho su marido, el qual la a querido matar".

En Arroba en 1739 cuando las autoridades del pueblo quieren saber sobre los rumores que corren  sobre las presuntas relaciones entre los vecinos y mujeres casadas. Uno de los presos fue sorprendido por su mujer cuanto estaba con su amante " y dicha mujer casada continuando su camino, y trabando question y pendencia entre sí ofenderla porque la llamó puta, la dicha mujer casada se asió a la dicha Irene diciendo que la había de sacar la lengua, y echándola en el suelo la entro la mano en la boca, y mordiendo la dicho Yrene al tiempo de sacarla la saco algún diente".

Ante estos hechos las autoridades de Arroba "por reconocer ser una pendencia de mujeres llaman al declarante Alonso García Serrano al dia siguiente por la noche y amonestaron a las mujeres y las dejaron hechas amigas"
Los tribunales al final no entraban en conflictos familiares, así la Real Cédula de 15 de Mayo de 1780, obligaba a éstos a no intervenir en "asuntos domésticos interiores de padres e hijos, marido y mujer o de amos y criados, cuando no haya queja grave escándalo, para no turbar el interior de las casas y familias".


Injurias y amenazas contra la autoridad
Algunas autoridades se sienten injuriados por no poder administrar la justicia como ocurre con el alcalde de Arroba de los Montes cuando el 1 de Agosto de 1787 envía una carta al Fiel del Juzgado refiriéndose "que se encuentra en un estado infeliz y deplorable" por no poder administrar justicia. Dice "resulta frecuentemente las injurias graves contra la Real Jurisdicción, negada la obediencia que se le debe, abolido sus respeto, quebrantadas sus providencias, con resistencias formales, improperios y escandalosos, continuación de insultos, desazones civiles, injurias y ofensivas entres sus vecinos, en las que concurren otros crímenes como son de venirse a las manos y herirse, y finalmentes sin dueño propio las heredades, frutos, esquilmos e industrias con se vive a causa del libertinaje con que este asunto proceden".

La denuncia del alcalde de Arroba fue despachada por Toledo contestando que "especificara los delitos concretos para que se iniciara una causa".

Las injurias a las autoridades por parte de los vecinos del pueblo eran denunciadas como ocurre en Marzo de 1618  cuando hay proceso por injurias iniciado de oficio contra Juan Gómez, carretero de Puebla de Don Rodrigo, "que llama majadero al alcalde", y que se escapa en Cuerva cuando lo trasladan a Toledo, refugiándose en la iglesia. Acaba siendo procesado y condenado Baltasar Martín, alguacil mayor que le llevaba a la ciudad. Otro caso parecido ocurre en Abril de 1757 cuando Juan García Zumajo insulta a unos de los alcaldes.

De todas las formas en ocasiones las autoridades locales no dan ejemplo antes los vecinos como ocurre en Noviembre de 1778 cuando hay una denuncia contra Pedro Gutiérrez, el escribano de Arroba de los Montes que es acusado de "embustero, trapacero... ilegal, parcial" cuando jugaba a los naipes".


Injurias contra el honor

El honor era uno de los bienes más preciados que tiene cada individuo en esta época, su reputación, honestidad y su buen nombre era incuestionable tanto que terminaba en denuncias y en ocasiones en homicidios. 
El estigma de ladrón en las sociedades rurales es una mancha que nadie quiere tener, considerándose una ofensa muy grave como ocurre en Mayo de 1732  cuando un portugués llamado Gonzalo Perez denuncia a su compatriota  Pascual González por acusarle de ladrón en publico.

Las ofensas por acusar por pequeños hurtos se consideran graves como ocurre en Junio de 1624 cuando hay una denuncia por insultar al denunciante por acusarle de haber robados unos pollos. Parece que "robar gallinas" era común en las sociedades rurales, otro caso ocurre en Enero de 1805  cuando cuando un padre e hija acusan a una mujer de "dañarles una gallina y robarle otra" y el marido lo denuncia por injuria.
Las gallinas eran robadas por algunos vecinos  foto de Jesús Víctor García

También el acusar a tu mujer de ladrona repercute también en la honorabilidad del marido por eso en Junio de 1617 Alonso Perez Murciano denuncia a a Alonso Granizo por "haber acusado a su esposa de robar ganado", al final hay un acuerdo y se retira la denuncia.

Tener la fama de moroso por no pagar sus deudas es una mancha que nadie quiere tener en los pueblos de los Montes de Toledo. Alonso Pérez, no debía tener buena fama de pagar sus deudas ya que tiene dos causas por demorarse en el pago de su deudas . Los acreedores se impacientan y se ponen nerviosos e insultan, como ocurre en agosto de 1624 cuando Alonso Pérez denuncia a Juan del Castillo "por insultar grave y públicamente" por negarse a darle el dinero prestado y que al final llegan a un acuerdo. El mismo Alonso Pérez, en Junio de 1634, pone  otra denuncia a Pedro Martín por llamarle "infame" por no pagarle una deuda.

Pero los delitos contra el honor propiamente dichos es cuando la calumnia trasciende de los personal a la sociedad como ocurre en Noviembre de 1642 cuando se inicia una causa por injurias cuando Alonso Perez Mudarra denuncia que Juan del Castillo le insulta en público diciendo "que era nieto de un verdugo" o en octubre de 1680 cuando Francisco Albañil denuncia a Juana Ruiz por decir a su esposa en el lavadero de Arroba de los Montes que "era judío".

Proclamar en público que era judío era una injuria que no se podía permitir ya que marcaba a toda tu familia, en los años 70 en el pueblo al escupir en el suelo te decían "nos escupas que es cosa de judíos"., en marzo de 1726 se inicia un proceso por injurias contra Andrés Arias por llamar a un vecino apellidado Herance que todos son judíos o en septiembre de 1788 un vecino llamado Domingo Martín insulta a la mujer de Francisco de Ayuso diciendo que son "judíos, herejes y escandalosos".

BIBLIOGRAFIA

-Archivo Municipal de Toledo  Caja 6237   Causa 971    Arroba
                                                  Caja 6232   Causa 793    Arroba
                                                  Caja 6235   Causa 941    Arroba
                                                  Caja 6233   Causa 877    Arroba
                                                  Caja 6328   Causa 3775  Navalpino
                                                  Caja 6234   Causa 891    Arroba
                                                  Caja 6234   Causa 913    Arroba
                                                  Caja 6234   Causa 891    Arroba
                                                  Caja 6236   Causa 961    Arroba
                                                  Caja 6235   Causa 939    Arroba
                                                  Caja 6224   Causa 528    Arroba
                                     
-Justicia y Criminalidad en Toledo y sus Montes en la Edad Moderna , Alfredo Rodriguez Gonzalez. Toledo 2009.

-Libreria de Jueces, utilísima y universal para toda clase de personas literatas y en especial para las que ejercen la jurisdicción eclesiástica, real y mixta en ambos fueros y en el de la Conciencia. Manuel Silvestre Martínez 1674.

-Diccionario de Autoridades de la lengua Española. 1737