EL MAL DE OJO EN ARROBA DE LOS MONTES

MARÍA DOLORES FERNÁNDEZ MARTÍN

JESÚS VÍCTOR GARCÍA

En los pueblos siempre hay una mujer que todo lo sabe y todo lo cura, tiene el don para curar enfermedades que la medicina no cura. Ni que decir que esta figura han existido desde los orígenes de la humanidad y existe en la actualidad.
Según el diccionario de la Academia de la Lengua de 1726, aojar es "hacer mal de ojo, dañar a otro con la vista, por haber en ella infección, que se comunica por los rayos visuales, o por mirar con ahínco por causa de envidia o admiración, y ha veces de cariño. Es voz compuesta de la partícula A, y del nombre Ojo.
El mal de ojo o "aojamiento" es un malestar inexplicable y repentino que puede incluso llevar a la muerte. Es una dolencia que se sale de los cauces naturales, para adentrarse en el tipo de enfermedades inexplicables. Superstición o realidad, la curación del mal de ojo se inserta en todo un sistema de terapéutica popular.

Está causado por ciertas personas "con fuerza en la mirada", personas que tienen la capacidad para poder causar mal físico o desgracia en general a otras personas, animales o plantas, con solo mirarla, bien de adrede o de forma involuntaria. La causa suele ser la envidia o el asombro ante la belleza o el esplendor de algo.

En el Boletín de Medicina, Cirugía y Farmacia del 20 de Abril de 1839 dice "Una de las preocupaciones que tenían nuestros abuelos era la de creer que con mucha frecuencia padecían los niños una enfermedad producidas por miradas fascinadoras, era el mal de ojo; de cuya supuesta afección decían (est infectio ab oculis infectis facta procter malitian anima cooperantis vels daemones)Y no solamente el vulgo, sino también los médicos, que han sido siempre los mas incrédulos entre los filósofos, se convencían en reconocer esta dolencia y la asignaban síntomas particulares con su terapéutica apropiada. Creemos que no sera fuera del caso estructurar brevemente la descripción del mal de ojo que se encuentra en algunos autores antiguos.
Las causas son alteración de los espíritus de una persona ya por envidia, ya por alguna corrupción de los líquidos y los cambios que sufren los humores durante la menstruación especialmente si esta difícil o por algún motivo se aparta del tipo natural;porque en todos estos casos los espíritus alterados pueden transmitirse por el aire hasta los ojos de los niños; los maleficios causados por viejas hechiceras y finalmente la influencia directa del diablo.
Los síntomas son debilidad y enflaquecimiento general, color terreo, inapetencia, vómitos y cámaras de leche algo cuajada de olor ácido, pulso débil y a veces frecuente, insomnio, inquietud" 

TIPOS DE MAL DE OJO

Entran elementos tan heterogéneos como la envidia, el cariño y la muerte.

Mal de ojo envidioso: En el mundo rural la envidia prolifera, porque todos los habitantes se conocen; todos son cercanos, y la envidia más poderosa siempre se cierne contra alguien cercano. Esa envidia provoca malas miradas, y esas miradas ponzoñosas hacen mal de ojo. Uno de los síntomas más comunes del mal de ojo es la mala suerte.

Mal de ojo amoroso: Con las muestras de cariño de una persona hacia otra se origina el mal de ojo. Estas personas pueden tener una gracia especial que provoca el mal, y numerosas veces no son conscientes de ello. Son personas normales que han nacido con la desgracia de emponzoñar a los que más quieren y admiran. El mal de ojo amoroso suele incidir en las personas más débiles, sobre todo niños.

Mal de ojo seco: Existe un tipo de mal de ojo letal, un mal de ojo que provoca la muerte. Es el más terrible de todos y se produce normalmente por envidia. El que hace mal de ojo seco lanza una mirada a la persona envidiada, lo cual provoca la fulminante caída de ésta.

SÍNTOMAS

Ese mal se manifiesta por varios fenómenos como delgadez, fiebre, palidez excesiva, dolor de cabeza, mareos, falta de apetito, malestar, vómitos, mirada perdida, expulsión de espuma dulce por la boca, y contracciones. También va acompañado de pesadez en los ojos, somnolencia, tristeza y ganas de estar solo, por regla general, de un decaimiento psicofísico, de una desgana.

También, en el caso de que la víctima sea un niño, las pestañas se vuelven legañosas y se apegotonan.

SANADORAS

Si existen unas personas con gracia para hacer el mal, aparecen otras con una gracia buena, que acaban con él y nos protegen.

Estas mujeres, con su saber milenario, arraigado en la más profunda tradición, sólo pretenden luchar contra el mal. Una lucha basada en la fe de unas oraciones y la devoción a unos santos. Una lucha que puede ser eficaz, pero nunca nociva, sirviendo de asidero a muchas personas.

Son mujeres que han aprendido de algún familiar las oraciones curativas o de vecinas.

DIAGNOSTICO Y ORACIÓN 

En algunas zonas, la comprobación de la existencia del mal se hace echando con un mechón de pelo o con un dedo unas gotas de aceite en un vaso o taza de agua; el comportamiento del aceite indica si la persona o animal está afectada de este mal. En caso de enfermedad es necesario decir una oración que presenta variantes dependiendo de la zona de la que se trate.

 

Si se deshacen las gotas en el agua, se supone que se tiene mal de ojo. Para curarlo se solían recitar oraciones a Dios, la Virgen o los santos. Estas oraciones solían ser secretas, pues si se hacían públicas, la curandera dejaba de tener “gracia” y desaparecían sus facultades curativas. La transmisión era sencilla y a solas, de boca a boca o sea "oral".

El rito del aceite y el agua consiste en lo siguiente: se prepara una taza de aceite y otra de agua. La mujer moja su dedo meñique en el aceite y derrama tres gotas en la taza de agua, repitiendo la operación tres veces. Luego se dispone a decir las oraciones al aojado. Si, mientras está pronunciando las oraciones, las gotas se van juntando, es que padece de mal de ojo. Si se diluyen y van desapareciendo es que el mal de ojo es muy fuerte. Si el aojado no podía estar presente, la rezandera, al menos, debía tener un pelo suyo que arrojaba al agua junto al aceite
.

Ritual del mal de ojo en Arroba de los Montes (foto de los autores)

Las oraciones que pronuncian son diferentes, aunque plantean la misma estructura.

Una Oración utilizada:

Jesucristo del huerto salió,
 A ojos malos se encontró
 Y le dijo ¿de dónde vienes? ¿A dónde vas?
 De matar, hechizar a…..
No que lo guardo yo,
 Tres horas antes que salga el sol,
 Dos te miraron,
 Dos te hicieron daño,
 Pero tres se han de sanar:
 El padre, el Hijo y la Santísima Trinidad.
 Santa Ana parió a la Virgen,
 Santa Isabel al señor San Juan,
 Estas palabras son ciertas y de verdad.
 Si te han hecho mal en la cabeza
 Pedimos a Santa Elena,
 Si te han hecho daño en los ojos,
 Pedimos a Santa Lucía y San Ambrosio.
 Si te han hecho daño en los pies,
 Pedimos a San Andrés,
 Con sus ángeles treinta y tres.
 Jesucristo vive, 
  Jesucristo reina,
 Jesucristo te ha de sanar,
 Con el Padre, el Hijo y la Santísima Trinidad.

Otra  Oración

 Malos ojos en el huerto entró,
 Con el Señor se encontró, 
Y dijo: malos ojos, ¿dónde vas?
 Voy a herir, a enfermar y a matar
. Dos te miraron
, Uno te hizo mal,
 Tres te han de sanar,
 Y son Padre, Hijo y la Santísima Trinidad
. Si es de los ojos, Santa lucía,
 Si es de los pies, San Andrés,
 Si es del cuerpo, Santísimo Sacramento, 
Si es de la cabeza, Santa Elena.

AMULETOS

Para prevenir esta dolencia se lleva un amuleto encima y en algunos lugares, además, cuando se está en presencia de una persona sospechosa de provocar el "mal de ojo", se cruza el dedo pulgar sobre el índice formando una cruz, denominado o "higa".

Higa realizada en Arroba de los Montes (foto del autor)

Uno de los más comunes es colgar en el cuello del recién nacido fragmentos de textos evangélicos guardados y cosidos a unas fundas decoradas

Otro método será el de llevar colgado en una bolsita un cortezón pequeño de pan. Otro amuleto será la todopoderosa cruz de Caravaca, popular talismán que no sólo protege contra el mal de ojo, sino contra, prácticamente, cualquier tipo de mal.

Se venden en platerías y tiendas o bazares unos amuletos llamados «higas», de plata o marfil, que son la representación de  un puño cerrado con el dedo pulgar colocado entre el dedo corazón y el índice, que se pone en la cuna de los niños o prendido con un alfiler en sus ropas y que también pueden usar los adultos. También servía el hacer llorar al niño cuando se piensa que se le acababa de echar «Mal de Ojo».

También sirven amuletos confeccionados por curanderos o bendecidos por ellos, que consisten en bolsista de tela o piel que se colgaban del cuello, que contenían una medalla, un trocito de piedra de ara o altar, alguna planta de tipo medicinal, una moneda antigua de cobre . Una medalla de alguna Virgen (la patrona del pueblo) y algunas migas de pan cocido en viernes ... «antes de ponerle esto a los niños tiene que bendecirlo alguien que tenga una gracia especial»

Estrella de 5 puntas o diablillo en la entrada de la puerta sur o de las mujeres de la iglesia de Arroba de los Montes como amuleto de protección

En el mundo del mal de ojo las personas son católicas,  unas mujeres que curan y hacen sentirse mejor a las personas. Esto no hace mal a nadie. Si la superstición ha prevalecido tantos años en las mentalidades, es porque los mágico e inexplicable existe. El mal de ojo es así, para algunos inexistente y para otros permanente, amenazando constantemente sus vidas.

MAL DE OJO EN ARROBA DE LOS MONTES

Arroba es un pueblo agrícola y ganadero, en el que la creencia en el mal de ojo se mantiene aún viva. Con una población envejecida, es una creencia que se mantiene dentro de una fe popular inculcada por los mayores y recibida fielmente por algunas jóvenes.

El entorno, la poblacion y la gente hace que Arroba de los Montes sea un lugar idóneo para practicas de curanderismo

Casi siempre son mujeres y algunas de ellas son reacias a decir la oración públicamente; la "susurran" pues si se les escucha o entiende pueden perder "el poder terapéutico", aunque también lo pueden curar los hombres. Para poder curarlo hay que creer en ello y en Arroba de los Montes a las personas que lo cura se llaman sanadoras.
Generalmente la transmisión es de madre a hijas, o en personas que tenga fe o una espiritualidad elevada. Esta transmisión ocurre cuando la persona que transmite es mayor o no va a estar en el pueblo u dejar a su discípula para que ocupe su lugar.

El mal de ojo lo echa cualquier persona unas con maldad otras por cariño.  También se cura a los animales (han curado terneros llevando el pelo del animal). Casi siempre lo enseña algún familiar o conocido, aunque  lo puede enseñar cualquier persona que sepa. Algunas sanadoras explican que para revelarlo a otra persona se hace así: se le da por escrito, esta persona lo lee, lo memoriza y se quema el papel.

 En Arroba no suele haber  amuletos específicos aunque sí recordamos que a los niños se les prendía con un imperdible entre la ropa una mano o puño cerrado.

Pila de agua bendita en Arroba de los Montes (foto del autor)

Muchas personas acuden a estas saludadoras para curar su mal.

Un mal inexplicable y desesperante que solo pueden paliar con la fe en las oraciones y los consejos de estas sabias mujeres.

Según nos cuentan no hay un don especial personal para poder hacerlo. Al parecer, el mal de ojo lo puede quitar cualquier persona que sepa rezar la oración.

Se necesita un plato con agua y un candil encendido o una mariposa (mecha).

La persona afectada de mal de ojo puede estar presente o no. Si no está presente se le coge un poco de pelo de la cabeza y se pone junto al plato y el candil. Mientras se hace la señal de la cruz continuamente sobre la persona, se va rezando esta oración que nos ha revelado una sanadora:

“Santa Ana a la Virgen parió

Santa Isabel a San Juan

“nombre de la persona” el mal de ojo te curo,

de constipado, del mal de cuajá

y de otra enfermedad

aunque fuera más”

Y se reza un credo.

Lo mismo se hace sobre el candil y también sobre el plato y sobre el pelo si no está el afectado presente. Cuando esto se termina, se moja el dedo índice en el aceite del candil y se dejan caer las gotas sobre el agua del plato. Si las gotas se agrupan sobre el agua no hay mal de ojo. Si no se agrupan y aparecen dispersas, existe mal de ojo y se debe realizar más veces hasta quitarlo definitivamente.

BIBLIOGRAFÍA:

Cuadernos de etnología de Guadalajara. 2013-2014, n.º 45-46. José Antonio Alonso Ramos BRUJERÍA Y MAGIA EN LA PROVINCIA DE GUADALAJARA

Carmen Hualde Pascual y Arantxa Ormazábal Herraiz. Usos y prácticas de medicina y veterinaria popular en la Campiña de Guadalajara Cuadernos de etnología de Guadalajara. 2002, n.º 34.

El logos de la superstición. Santiago Sánchez Jiménez.-Nuevos estudios etnográficos en torno a la Mancha.-Ed. IES  Santa María de Alarcos nº 6.-Ciudad Real 2010

INFORME SOBRE EL «MAL DE OJO» EN LA PROVINCIA DE CIUDAD REAL

JUAN JOSE ESPADAS PAVON Licdo. en Geografía e Historia Especialidad de Prehistoria y Etnología.

Biblioteca Virtual de Castilla-La Mancha. Libros, 1984 - II Jornadas de Etnología de Castilla - La Mancha.

TESTIMONIOS ORALES DE PERSONAS DE ARROBA DE LOS MONTES

-Mal de ojo en un pueblo de Los Montes de Toledo: Los Yébenes (I)

GONZALO ROSELL GUZMÁN.- REVISTA DE ESTUDIOS MONTEÑOS Nº 149 y 150 ASOC.CULTURAL MONTES DE TOLEDO

-JERÓNIMO ANAYA FLORES.- REVISTA DE ESTUDIOS MONTEÑOS Nº 100 ASOC.CULTURAL MONTES DE TOLEDO.
-BOLETÍN DE MEDICINA, CIRUGÍA Y FARMACIA.